"A través de la música hemos liberado muchas de las frustraciones que, ahora más que nunca, amenazan volverse quistes, volverse parte de la vida. Y vivir frustrado o deprimido lleva a vivir menos y peor, a no valorarse y acabar vendiendo uno su dignidad, o incluso regalándola.
Juntos somos más dignos y vivimos más y mejor."
Este es el encabezado que se puede leer en el Bandcamp de la banda 'El Pardo¿ un quinteto de Madrid que acaba de publicar su primer largo el pasado diciembre y que han decidido llamar '2013¿.
Como se puede intuir, no es una banda al uso, lo que primero llama la atención (pero desde luego no lo único) son sus letras, escritas por Raúl, pero consensuadas por todos. En ellas se ve una clara confrontación con la realidad que vive y rodea al país, dirigiendo un ataque claro a la élite gobernante tanto política cómo económica. Pero no paran su discurso en este fácil objetivo, trasciende un voraz escupitajo también a las masas adoctrinadas por la política, las modas o la parsimonia ante lo que sucede a su alrededor.
Su discurso estilístico es también un 'tutum revolutum¿, sonando primero a punk, aquello que podía ser garaje, coqueteando en cierta medida con el rock y una sucia electrónica sin miramientos. No es que los pardeños se metan en camisas de once varas o no sepan para donde están canteados, su heterogeneidad se debe a que ajustan el discurso a un tempo, normalmente bastante continuo, para luego irlo revistiendo de matices que termina por envolver el discurso desgarrador que promulgan.