En el otoño de 1965 nuevos aires musicales corrían por la bella ciudad de San Francisco. Una nueva revolución se estaba gestando desde el distrito de Haight-Ashbury entre una generación de jóvenes que se fijaban en unos recién llegados llamados Jefferson Airplane. Cuando contrataron en 1967 a la vocalista Grace Slick la banda adquirió toda la importancia que merecía. Era el más bello rostro femenino del rock ácido. Fueron dejando canciones para la historia en un ambiente de inundado de carteles hippies, flores, campanas, aroma a incienso y "otras hierbas". Existía una extraña camaradería, una fuerza común en su música que hablaba de fantásticas historias, viajes químicos, maravillosos descubrimientos y sentimientos de rebeldía hacia lo establecido. La musica fluía libremente, de forma improvisada, abarcando el jazz, los blues, el folk y el rock, en una atmosfera irreal que hablaba de ciencia-ficción, política, y hedonismo. Jefferson Airplane se confirmaron en el Festival de onterrey de 1967 y fueron uno de los grandes triunfadores de Woodstock en el 69. Al inicio de la década de los 70 vinieron los cambios, incluso de nombre, que nos hizo encontrarnos con Jefferson Starship, que por cuestiones legales hubo de acortarse hasta Starship en sus últimos años. Su música también era diferente, aunque siempre encontramos canciones evocadoras que también se elevan a las primeras plazas de las listas de éxitos. Cuando Grace Slick ha cumplido sus primeros 72 años, nos hemos fijado en esa comuna musical que nos ha dado cuatro décadas de gran música, de la mejor música contemporánea.
Hecho a mano
El aeroplano de Jefferson
14/11/2011
56:05