Abandonamos definitivamente Berlín, pasando por Bayreuth, no sin antes detener nuestra mirada en varios periodistas españoles que se pasaron por el Romanisches y que incluso hicieron tertulia en aquel café, mientras fueron corresponsales de sus diarios.
Entre ellos, comentamos algunas peripecias cafeteras y vitales de Josep Plá, Felipe Fernández Armesto (alias Augusto Assía), Eugeni Xammar, Agustí Calvet “Gaziel”, Julio Camba, Chaves Nogales y César González Ruano. Algunos frecuentaron el lujoso Hotel Adlon, pegado a la Cancillería nazi y cuya fachada quemada aparece en el filme Berlín Express (1948) que dirigió Jacques Tourneur.
Nos sirven de guía varios libros sobre estos ilustres gacetilleros: el de Xavier Pericay, “Una generación Viajera” (ed. Athenaica) y la premiada biografía de González Ruano escrita por Javier Varela titulada “La Vida Deprisa” (ed. Fundación José Manuel Lara), entre otros.
El Putsch de Munich, golpe de estado perpetrado por Hitler y sus secuaces en 1923 en la cervecería muniquesa Bürgerbräukeller, nos da pie a polemizar sobre algunos encuentros con el líder nazi, como el que mantuvo la ubicua agente de prensa y organizadora de eventos estadounidense Elsa Maxwell, en Bayreuth, con el señor del bigotito negro cuadrangular nombrado Führer a partir de la década de los 30.
Después de tomarnos ad hoc un delicioso Journalist Martini, nos vamos rumbo a Barcelona de la mano de Isolde Wagner y su familia.
La música en esta ocasión nos la brindan las genialidades de Kurt Weill, Richard Wagner, Friedrich Hollaender o Paul Dessau, entre algunos compositores escogidos, en las interpretaciones de Marlene Dietrich, Otto Kemplerer, Gisela May, René Kollo, Leonard Bernstein, Eileen Farrell y otros grandes artistas que grabaron las obras seleccionadas.