¿Cómo funciona el cerebro de un robot? ¿Realmente las redes neuronales sintéticas están inspiradas en el cerebro humano? Son algunas de las preguntas a las que los ingenieros de Telecomunicaciones Ignacio Peletier y Miguel Serrano dan respuesta en su libro "¿En qué piensan los robots?", editado por Deusto y concebido como una guía para entender la disrupción que viene en la nueva era de la Inteligencia Artificial.
Con Serrano, alumno del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), mantenemos una apasionante charla sobre las semejanzas entre el cerebro humano y el sintético, y la manera de procesar la información de ambos. Explicamos cómo deben ser los datos que necesita una IA para funcionar correctamente y de por qué, en ocasiones, los ingenieros desconocen los procesos que llevan a las máquinas a alcanzar el éxito en sus cálculos. El ingeniero experto en IA plantea un supuesto imaginario de una tienda que, aplicando algoritmos, lograría generar un éxito de ventas. Y lo apoya con un ejemplo real, el reflejado en la película "Moneyball" ("Rompiendo las reglas", en español), la historia de un club de béisbol que, sin apenas presupuesto, consiguió armar -gracias a un ingeniero de datos y sus algoritmos- un equipo ganador; un sistema que con el tiempo se ha implantado en todos los deportes a nivel profesional.
¿Cómo gestionar los errores cometidos por una IA?. Es un asunto, comenta Serrano, que aún está de pendiente de un abordaje integral. "Es un tema que apela a nuestra dignidad como especie", señala. "El debate -concluye- estaría en decidir hasta qué punto queremos subrogar en las máquinas decisiones trascendentes". Ahí dejamos la pregunta para el debate: ¿Queremos seguir tomando esas decisiones como humanos?.