Soledad Gallego-Díaz. Periodismo riguroso y de izquierdas

Hoy contamos en “La España vivida” con una periodista de raza, que ha sido directora del diario El País en los últimos años, pero a la que siempre le gustó más el contacto directo con la información que la gestión interna de una redacción, aunque también se empleó a fondo en ello cuando le tocó. Se trata de Soledad Gallego-Díaz, Sol para sus colegas y amigos, entre los que tengo el privilegio de figurar. Hemos querido contar con el testimonio de Sol Gallego porque desde sus casi cincuenta años de pertenencia a la redacción de El País ha acumulado mucha experiencia, para juzgar la evolución de la sociedad española, y a la vez para conocer y analizar a fondo la de los diversos países de Europa y América en los que ha trabajado como corresponsal. Digamos que para hacer un diagnóstico de la evolución de los medios de comunicación y su influencia tanto en España como en la sociedad occidental, en sentido amplio, la experiencia y las conclusiones a las que haya llegado nuestra invitada constituyen una aportación del mayor interés. Entre otras cosas porque a Sol siempre le ha preocupado que los periodistas cumplamos bien un primer objetivo, el de la fidelidad a los hechos, sin distorsionarlos para arrimarlos al ascua ideológica que tenga cada uno. A Sol Gallego también le ha interesado siempre que los periodistas sepamos defender la independencia de nuestro trabajo, y queremos preguntarle sobre el estado de salud de éste y otros grandes principios de la profesión periodística y los medios de comunicación, en un momento de especiales dificultades económicas.