El vellón de oveja merina fue el oro blanco de Castilla durante cinco siglos. La extraordinaria calidad de sus fibras, fruto de una meticulosa selección de la raza, aupó a España a la cabeza de los mercados lanares internacionales a partir del XIV. Un éxito debido a la protección que brindó la monarquía a la trashumancia con la creación del Honrado Concejo de La Mesta.
Esta agrupación, poderoso sindicato ganadero nacido en 1273 bajo el reinado Alfonso X el Sabio, facilitó el tránsito de los rebaños en sus necesarias migraciones estacionales en busca de pastos frescos. Se trata de un caso único en el mundo, como también lo es el sistema de cañadas reales y vías pecuarias que ha llegado hasta nuestros días con sus más de 125.000 kilómetros, y que hacía posible este desplazamiento pendular norte-sur. Algunas de estos caminos ya existían en el Neolítico y coincidían con las rutas de los animales salvajes en sus migraciones anuales.
El documental La Mesta, reino de lana, con guion de Álvaro Soto, recorre la historia de este gremio desde la Baja Edad Media hasta su disolución en 1836. El espacio refleja el proteccionismo imprimido por los Reyes Católicos a La Mesta; la crisis coincidente con los últimos Habsburgo; y el resurgimiento experimentado al llegar los Borbones. La Mesta jugó un papel decisivo para la economía del reino y su actividad dejó profunda huella en la cultura española. El programa también pone el foco en los claroscuros de esta institución privilegiada, cuyos roces con otros estamentos y, particularmente, con la agricultura le han valido una cierta leyenda negra.
El final del Antiguo Régimen y la reforma agraria liberal del siglo XIX precipitaron el ocaso de La Mesta. Para entonces España ya había perdido el monopolio sobre la raza merina debido a inoportunos obsequios de estado y a la exportación y robo de rebaños en torno a la Guerra de la Independencia. Más tarde, ya en el siglo XX, con la irrupción de las fibras sintéticas y el furor por la poliamida y el poliéster, se asistió a la decadencia del propio negocio lanar.