El informe anual de Amnistía Internacional ha acusado a los gobiernos de países desarrollados y a los poderes económicos de anteponer sus intereses al bien común del planeta. El organismo ha denunciado que los políticos mundiales traicionaron en 2021 las promesas de una "recuperación justa" de la pandemia y que la desigualdad vacunal con África agravó la injusticia racial. Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España, ha explicado en Las Mañanas de RNE que “los gobiernos de la Unión Europea se han negado a compartir conocimientos para que las vacunas pudieran fabricarse en países del sur y esto ha provocado la muerte de muchas personas.”
El organismo asegura que la inacción y la parálisis de los organismos internacionales en las últimas crisis de seguridad mundial allanó el camino de la invasión rusa de Ucrania. En relación con los refugiados, Amnistía habla de primera y de segunda. Beltrán asegura queEuropa no trata igual a los refugiados de otras guerras como a los de Ucrania y que esta realidad reside en el racismo: “Hablamos de conflictos en Yemen, en Burkina Faso, en Etiopia y lo que está fallando es que la política de personas refugiadas enEuropa no busca acogerlos y respetar sus derechos, lo que busca es tenerlos fuera del continente europeo. Creo que la única esperanza es que Ucrania marque un preferente importante y cada vez sea mas difícil rechazar a la gente que huye de otros países.”