En Italia se ha abierto un proceso para regularizar a unos 200.000 trabajadores inmigrantes sin papeles que trabajan en el campo y en el sector doméstico y su ministra de agricultura, Teresa Bellanova, se ha implicado de una manera muy personal. En una entrevista exlusiva a RNE, Bellanova ha explicado que se trata de una norma "importantísima".
"No podemos llamarnos civilizados si parte de nuestra actividad productiva recae en personas a las que no reconocemos el derecho de existir", admite.
Bellanova sabe bien lo que es trabajar en el campo, en condiciones difíciles y sin papeles. No en vano, tuvo que dejar el colegio con 14 años y convertirse en una precoz jornalera.
"Nos levantábamos a las tres de la madrugada, recorríamos 150 km par trabajar y volvíamos a la noche. Claro que me sentí explotada y me rebelé pero no era fácil encontrar trabajo", explica.
La ministra reconoce que hay que ampliar esta regulación a otros sectores, puesto que Italia cuenta con 600.000 personas sin papeles.
"Se trata de hacer visible a los invisibles y acabar con esta forma de exclavitud", como declaró, entre lágrimas, el día que anunció la medida en Parlamento.
Es una entrevista de la corresponal deRNE en Italia, Sagrario Ruiz de Apodaca