Biden tiene por delante muchos retos en el ámbito de la política internacional. El primero es China que cada vez expande más su influencia por todo el mundo. El nuevo inquilino de la Casa Blanca ya ha dicho que no ve ese país como una amenaza pero sí como un desafío económico y comercial. El segundo gran reto es Rusia: el entorno de Biden ya ha pedido la liberación del líder opositor, Navalni, después de calificar a ese país como el mayor enemigo de Estados Unidos. El tercer punto es Oriente Medio e Israel. Biden se ha mostrado siempre contrario a los asentamientos judíos. El cuarto gran tema es Irán donde le preocupa el crimen organizado y la proliferación nuclear, también Latinoamérica. El último punto es el Sáhara Occidental donde podría impulsar el solicitado referéndum.