La consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, ha asegurado en 'Las mañanas de RNE' que, si la situación epidemiológica sigue empeorando, tomarán medidas más drásticas para Navidad, volviendo al planteamiento inicial que hizo al ministerio de Sanidad, sin la figura del allegado y con reuniones de un máximo de seis personas. "No contemplamos un cierre total, pero si los casos de coronavirus siguen subiendo, reduciremos las reuniones a un máximo de seis personas de dos núcleos convivenciales", ha explicado.
Casado cree que es demasiado pronto para afirmar si habrá una tercera ola en enero. "Espero que no nos ocurra como en Estados Unidos después de Acción de Gracias. Está en nuestra mano reducir los riesgos", ha dicho Casado, que reconoce que está preocupada porque en su comunidad hay muchas personas en la UCI y eso puede bloquear los hospitales. La consejera considera que es "muy probable" que la campaña de vacunación pueda comenzar antes de que acabe el año.