El mercado inmobiliario cerró el año 2022 con un crecimiento del 14,5% respeto al 2021: se compraron cerca de 650.000 viviendas, la mayor cifra desde 2007. Julio Rodríguez, expresidente del Banco Hipotecario, lo ha calificado como un "perfil positivo de expansión", aunque el sector entró en "una nueva etapa" en la segunda parte del año. "Ha habido un impacto recesivo derivado del aumento de los tipos de interés", explica Rodríguez, que asegura que 2023 empezará "un poco bajo" pero podrá producirse una recuperación.
"La encuesta de préstamos bancarios de la Unión Europea ha informado de que se ha encarecido las condiciones de las concesiones, hay mayor percepción del riesgo por parte de los bancos y menor demanda de crédito por parte de los hogares", cuenta. El economista no cree que los precios puedan bajar este año, sino que "en lugar de crecer un 7,6%, puede haber aumentos moderados". "Los alquileres subirán más porque existe una escasez de oferta de viviendas de alquiler [...] El problema de acceso a la vivienda sigue siendo bastante complicado", expresa.
Informa Blanca Pascual