Con la detención de Carles Puigdemont todavía en la palestra, la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, en Las Mañanas de RNELas Mañanas de RNE, ha declarado que respetarán las decisiones judiciales y que seguirán el camino del diálogo y las políticas de reconstrucción con Cataluña, aunque no cree que este suceso afecte a la mesa de negociación.
En el terreno de la ciencia, confirma la ministra que"va a haber más dinero" para esta tanto en los Presupuestos como del Plan de Recuperación de la Unión Europea. Una ciencia que "salva vidas", durante la pandemia y con su labor de investigación en La Palma, tras la cual se tomaron decisiones políticas como la evacuación de las zonas afectadas, evitando consecuencias mayores. Es por eso que pone el foco en la necesidad de sacar adelante el pacto por la ciencia para mejorar el sistema científico español. Aprovechando esos Fondos de Recuperación, ha anunciado un Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) destinado a destinado a la investigación en medicina personalizada con una inversión superior a 500 millones de euros. Entre sus líneas fundamentales se encuentra la investigación del cáncer.
Señala que a consecuencia de la crisis de 2008 y las políticas de austeridad, no se favorecieron las invesiones en ciencia, ni públicas ni privadas, y se sucedieron las "fugas de cerebros", por lo que dice, se va a promover un"gran plan de choque" para atraer a científicos, mejorar las conciciones de los centros de investigación y la contratación de estos en el sistema público y en el privado. "O acometemos los cambios aquí o cuando llegue el cambio, nuestras empresas cerrarán", añade. Sobre el pacto por la ciencia afirma que podría llegar al Congreso a final de año, debido a que aún se está revisando.
Habla la ministra Morant también sobre la vacuna contra la COVID-19. La investigación de la vacuna española más avanzada es la de Hipra, en fase de ensayo y con buenos resultados. "Si todo va bien", afirma, "la empresa ha anunciado que comenzará su producción en octubre y a principios del año que viene podría estar comercializándose". No va tan bien la desarrollada por el CSIC, que se encuentra estancada en la fase de aprobación por parte de la Agencia Española del Medicamento.
Sobre La Palma, afirma que aún no se va a declarar como zona catastrófica porque aún no ha terminado la erupción y no se pueden evaluar los daños, pero que, a través de la ciencia, se tratará de analizar cómo acometer la recuperación tanto de bienes materiales y como de la naturaleza. "El daño siempre es irreparable, pero en la medida de lo posible interaremos que la gente recupere su vida", concluye la ministra.