Luis Sendra, Decano del Colegio Oficial de Arquitectos de la Comunidad Valenciana analiza si los bloques incendiados pueden acabar colapsando. Sendra explica que en principio no parece que haya un eminente riesgo de colapso estructural, si bien habría que ver el estado de los pilares y forjados. El decano expresa que este edificio fue construido en 2005, aunque durante la crisis de 2008 había gran parte de las viviendas sin vender. Entonces se construyó una capa exterior que, apunta, podría haber ejercido un "efecto chimenea" que habría ayudado a extender el incendio en el día de ayer. También apunta a un tipo de polímero, el poliuretano: “Hay un revestimiento sobre la fachada que es el que da la imagen exterior que está hecho con poliuretano. Habrá que analizar si ha sido ese material o no”,.
Sobre si otro incendio de estas características puede ocurrir en este barrio de Campanar, donde todos los edificios están construidos de manera similar, Sendra defiende que podría darse si los materiales son inflamables y si el edificio está expuesto. En el edificio donde ocurrió el incendio “había terrazas, elementos decorativos en las terrazas que no tienen prevención contra incendios, toldos”, componentes que propagaron las llamas, expone el decano. “En principio empezó a prenderse por unos toldos y el viento y el efecto chimenea ayudaron”. Sendra sentencia que, al existir desaparecidos, hay que buscar primero a por las personas y después analizar las causas y posibles responsabilidades.