Mónica García, ministra de Sanidad, ha respondido en Las mañanas de RNE con Josep Cuní a las protestas de médicos de toda España por el nuevo Estatuto Marco de Sanidad defendiendo la necesidad de actualizar un documento que "no se ha tocado en 20 años" y que ha provocado "todos los malestares" actuales. Por eso, el nuevo estatuto, "vivo" y que "aún se está dialogando", "va a cambiar la forma de trabajar en nuestro Sistema Nacional de Salud". Aunque García también ha reconocido que "entiende que haya resistencias" y ha asegurado que "no tiene problema en que compañeros médicos protesten en la puerta de mi despacho", ha inistido en las ventajas de este nuevo estatuto, que, ha dicho, "acaba con la precariedad" y recoge "muchísimas mejoras", algunas que incluso vienen de "las sentencias que han ganado, entre otros, los sindicatos que hoy se manifiestan".
En alusión a las críticas que los médicos han manifestado y que han provocado la convocatoria de movilizaciones, ha sido tajante, "soy médica, pero no solo soy la ministra de los médicos", ha dicho, por eso, insiste, tiene que velar "por todos los profesionales" y por la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud. Aunque ha reconocido que "tiene que haber una parte dedicada a las particularidades de los médicos", asegura que "cabe en el Estatuto Marco", y que lo adecuado es "no segregar", porque eso significaría "volver a los años 70".