Se han cumplido seis meses desde que los talibanes tomaron el poder en Afganistán y desde que las mujeres y niñas perdieron todos los derechos y libertades que consiguieron hace años, que quedaron reducidos a nada. María José Rodríguez, abogada, y Helena Ancos, doctora en derecho y consultora, son colaboradoras de European Network of Migrant Women, de la Asociación Europea de Mujeres Juristas y de otras ONG como Fourteen Lawyers. Han contado en Las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso la situación de muchas mujeres que consiguieron huir de Afganistán y que esperan la respuesta de las embajadas. En Abu Dabi hay más de 2.500 personas que resisten en campos de refugiados, en condiciones muy precarias, ya que la acogida de estas familias supone un proceso legal lento, que empieza con una serie de entrevistas para comprobar la identidad de estas personas y su situación de riesgo.
Helena es madrina de una de estas familias. “Queremos ser una mano amiga en España, son personas que vienen sin nada, con lo puesto, que tienen que empezar de cero, con mucho dolor y desesperanza. Nuestro trabajo es complementario de las ONG y nuestro propósito es proporcionarles apoyo en sus necesidades día a día”, expresa Helena. De esta forma encuentran alivio y una sensación de esperanza a la hora de poder rehacer su vida e integrarse en España.
Las que no pudieron huir del país llevan meses encerradas en sus casas, escondidas y sin poder recuperar la vida que tenían. María José recibe cartas de algunas de estas mujeres, que le cuentan que en el país no hay orden ni justicia y le transmiten asesinatos constantemente que no salen en los medios de comunicación. Se trata de familias que ya estaban amenazadas, mujeres viudas con maridos que fueron asesinados por los talibanes, jóvenes con niños pequeños. Para ellas, la posibilidad de alcanzar la frontera con Pakistán es imposible.