En la frontera con Polonia lo que más se sigue viendo son mujeres y niños tratando de huir de la guerra en Ucrania. Nuestros enviados especiales Laura Alonso y Sergio Jiménez se encuentran a apenas 27km de allí, donde los colegios polacos se preparan para la llegada de los refugiados más pequeños. Nos informan de que algunos centros están organizando actividades y encuentros para que los estudiantes se vayan adecuando a la situación, mientras esperan con los brazos abiertos su llegada.
Una de ellas es la Escuela Número 7 de Chełm (Szkoła Podstawowa nr.7), que recibe a sus alumnos con un gran cartel que pide "solidaridad con los ucranianos" y que los chavales traigan todo lo que puedan: ropa, juguetes o alimentos. Una de las profesoras de Inglés, Aniuska, cuenta que el inicio de la guerra les sorprendió de puente, así que a la vuelta todo eran preguntas: "Estaban asustados, preguntaban si iban a venir niños ucranianos". En otra escuela de primaria, Yolanta, otra profesora, también nos explica que sus alumnos apenas hablan con los profesores y que "todo el mundo tiene miedo". En otro colegio, están preparando actividades para acoger a los niños ucranianos: "Queremos apoyar a los niños así que hemos organizado encuentros entre ellos para que se familiaricen", cuenta la directora del centro.