La trompa es capaz de transmitir gran sensibilidad por esa manera tan suya de ser, de emitir los sonidos, de frasear, de vibrar, de respirar y dar vida a tantas hermosas melodías. Porque eso es lo que es la trompa: color y melodía en estado puro, mucho más que ritmo y apoyo armónico; bien lo saben sus más animados defensores, sean estos pequeños estudiantes o grandes maestros de la composición e interpretación.
Haydn, Concierto nº 1 en Re mayor, Hoboken VII D/3: Allegro: Hermnann Baumann (trompa) y Academy of St Martin in the Fields, Neville Marriner (dir.).
Mozart, Concierto nº 1 en re mayor, K.412: Michael Thompson (trompa solista y director), Bournemouth Sinfonietta.
Weber, Concertino para trompa y orquesta op.45, y R. Strauss, Concertino para trompa nº 1: Hermann Baumann (trompa), Orquesta de la Gewandhaus de Leipzig, Kurt Masur (dir.).