Un tercio de los proyectos científicos europeos están liderados por científicas españolas. Sin embargo, en España todavía los hombres representan casi el 70% de los integrantes del Consejo Superior de Investigaciones. Algo que también se refleja en las carreras científicas: en España solo un 11,8% del alumnado universitario que estudia ciencias son mujeres. Dato todavía más preocupante si se tiene en cuenta que solo un 4% de 15 años quieren dedicarse a este sector. "La carrera científica es una carrera muy competitiva y hay algunos momento en el que las mujeres se sienten excluidas de este proceso", asegura Teresa Valdés-Solís, vocal de la Comisión de Mujer y Ciencia del CSIC, quecritica que laigualdad de género todavía tiene que evolucionar más dentro del Consejo: "Es una evolución todavía demasiado lenta. Ya deberíamos tener unos números de profesoras de investigación mucho mayores de lo que ocurre en la actualidad. Todavía hay obstáculos más o menos visibles o invisibles que dificultan que ascendamos en igualdad de condiciones".
La gestión de la erupción del volcán de La Palma fue dirigida por dos mujeres: Carmen López y María José Blanco, ellas han sido las responsables de controlar el volcán y de llevar a cabo su vigilancia. María José Blanco cuenta que no hubo distinción de género a la hora de obtener su puesto, porque no hubo otra opción. No ha sido hasta el año pasado, con la catástrofe de La Palma, cuando se dio cuenta de la trascendencia de su trabajo: "Te das cuenta de la trascendencia del trabajo que se está realizando por el grupo cuando lo pones en juego en una situación como la de Cumbre Vieja" y asegura que hasta entonces no habían visto reconocido su labor y la labor de la ciencia.
Elena Manjavacas es física, reside en Baltimore y forma parte del equipo que trabaja para la NASA desarrollando un proyecto que impulsará el mayor telescopio jamás puesto en órbita, el James Webb Space. Manjavaca asegura que no siempre ha sido fácil ser mujer científica: "Ha sido un reto a lo largo de mi carrera. A veces me he encontrado sola en mis grupos de investigación, rodeada de hombres. Eso te hace sentir fuera de lugar y como que tienes quealzar tu voz para que sea oída con un poco más de esfuerzo de lo que lo hacen tus compañeros hombres". Elena Manjavacas está convencida de que los grupos mixtos funcionan mejor y anima a las niñas a estudiar ciencia: "Todo el mundo puede estudiar ciencias, a pesar de lo que nos hayan dicho. Se ha demostado que la ciencia es para todos y todas. Su contribución en el futurova a ser mucho más valorado de lo que ha sido hasta ahora".
Un reportaje de Laura Masegosa.