También lo perdieron todo, pero su situación es todavía más grave porque, al estar de forma irregular, sin papeles, son invisibles para las administraciones
Han pasado tres meses de la DANA en Valencia y la reconstrucción sigue en marcha lentamente, las ayudas van llegando poco a poco, pero hay un vacío para todas esas personas migrantes sin documentación: también lo perdieron todo, pero su situación es todavía más grave porque, al estar de forma irregular, sin papeles, son invisibles para las administraciones. Isabel Jiménez, periodista del área de Sociedad de RNE, nos acerca a esta realidad hablando con personas como Mainor, hondureño que lleva cinco años en España, cuya historia, muy parecida a la de sus vecinos afectados por la riada en el barrio de La Torre, empezó a tomar un rumbo distinto al de sus vecinos a partir del día 30 de octubre: "Hemos ido a servicios sociales porque obviamente todas las cosas que se perdieron en el bajo (en el que vivía) eran nuestras...y al final lo que nos han dicho es que como no estamos empadronados allí no podemos acceder a ningún tipo de ayuda", lamenta.
Silvana Cabrera, de Regularización Ya Valencia, cuenta que estas circunstancias las padecen otros muchos migrantes en situación irregular: "Muchas veces estas personas o subalquilan habitaciones o no pueden acceder a un contrato de alquiler justamente porque la gente se aprovecha de la situación administrativa en la que están", explica. Las casuísticas de estas personas son muy distintas, pero en general se resumen en un agravamiento de la vulnerabilidad desde que pasó la dana: "Las personas migrantes ahora mismo están sin trabajo porque no existe movilidad para poder venir a valencia, ni para poder ir entre los diferentes pueblos afectados de la Horta Sud, no pueden pagar sus alquileres, no pueden comprar comida...", hace hincapié Cabrera.
