El japonés Iwao Hakamada es la persona que más tiempo ha pasado en el corredor de la muerte. 56 años después de ser condenado a la pena capital en Japón, este exboxeador ha sido declarado inocente del cuádruple asesinato del que se le había acusado con pruebas falsas. La absolución de Hakamada ha servido para recordar que en Japón sigue vigente la pena de muerte: más de un centenar de condenas se confirmaron en diciembre de 2023.
Andrés Krakenberger, portavoz de la Asociación contra la pena de muerte Pablo Ibar, insiste en que "la pena de muerte es un castigo cruel, inhumano, degradante, sujeto al error judicial e irreparable". "Y no es más disuasoria que otras condenas", añade. Y reconoce que, para el preso absuelto, pasar más de media vida condenado y aislado es "incompensable".