Una mujer luchadora y una superviviente, de la familia, del colonialismo británico, del racismo, la guerra, el comunismo, una superviviente de la condición femenina, del amor y de la fama. Testigo de excepción de un siglo de guerras, Doris Lessing se implicó en la batalla de conseguir un mundo no sólo mejor, sinó bueno y decente.
Nacida en Persia -actual Irán- en 1919, los recuerdos de su infancia están marcados por un padre moralmente débil y una madre autoritaria. A los 15 años, se marcha del hogar paterno, y a los 19, se casa por primera vez e inicia su militancia comunista, que abandonará pronto al conventirse en una de las primeras voces en denunciar los crímenes del estalinismo.
Doris Lessing luchó desde la militancia y desde la literatura, denunció guerras y miserias, pero no se le notó el trinfo y eso, tal vez, le concedió el perdón y el reconocimiento a una de las autoras mas molestas con los convencionalismos. Ni el Nobel de Literatura, concedido en 2007, consiguió cambiarla.