Las calles de Murcia se levantan con el eco de la manifestación que tuvo lugar ayer a mediodia en el municipio, por parte de los agricultores y ganaderos de la Región, quienes sumaron un total de más de 6.000 personas y más de 500 tractores para reclamar por el incremento de los costes de producción, la subida del precio de la luz, la competencia desleal de países extra-comunitarios y -en la Comunidad-, por la incertidumbre sobre el futuro del trasvase y el precio del agua desalada.
Mientras, en el plano político también hubieron desacuerdos durante la jornada de ayer, miércoles 17 de febrero, cuando la diputada del Partido Socialista, Virginia Lopo, dirigió a la diputada del popular, Miriam Guardiola, un gesto con el 'dedo corazón'. Todo esto, en medio de una sesión plenaria en la que se aprobó, en medio de reproches, una moción de los expulsados de Ciudadanos para que el Gobierno de la nación adopte medidas y rebaje el precio del agua desalada a los agricultores; y otra del Partido Socialista para que se elabore el distintivo de agricultura sostenible del Mar Menor y se den ayudas a las empresas que se distingan por sus buenas prácticas.
