No eran molinos. Clásicos de la literatura española
La pared contigua, de María Victoria Atencia
17/02/2023
24:36
Con La pared contigua, de María Victoria Atencia, caminaremos en Málaga por el Paseo de Reding para tocar las luces interiores de escenarios vacíos. Pasearemos por vestíbulos de hoteles al final de una avenida donde se presiente la marea, con su vaivén flotante, y sentiremos la vida soñada como una presencia no tanto invisible, como imaginada, auscultada con timbres sensoriales, en la corporeidad fantasmal del asombro, con una demora espiritual. María Victoria Atencia ha convertido Málaga en una percepción afinada y sutil, como un violín flotante que de pronto desprende una especie de polvo de hadas de salitre, y nos envuelve con notas de hermosa delicadeza.