Esta semana en Palabra Voyeur os traemos a Adriana Bañares con su poemario Urbe Capensis.
El voyeur de esta semana se ha despertado sudoroso, con el sonido de una lluvia diferente al que está acostumbrado. Un goteo denso como el de la tinta vertida por Adriana Bañares en su poemario Urbe Capensis, editado por Prensa Universidad de Zaragoza y que tiene a todos los personajes desconcertados por un nuevo fenómeno meteorológico, una lluvia negra y espesa que trastoca todo su presente.
Poema Silencio
Silencio.
En las bocas de todos los niños.
Silencio.
En las sobremesas de los mayores.
Silencio.
En nuestras bocas manchadas de lluvia densa,
lluvia negra
en nuestra lengua.
En nuestras manos.
Llegaremos a casa.
Y en la casa nos esperará el silencio espeso
denso negro silencio.
Y en la casa limpiaremos el cristal de la ventana con las manos
para tratar de ver la calle.
Para tratar de comprender de dónde viene la lluvia.
Cuándo dejará de caer.
Dos lunas
como dos ojos en blanco
aparecen en el cielo cada noche.
Nunca hubo tanta luz y, sin embargo,
las calles no estuvieron antes más oscuras.
Quién puede dormir con tanta luz sobre
con tanta luz sobre
con tanta luz.
La calle brilla como unos zapatos de charol que se quedaron pequeños y, aun así,
los llevamos puestos porque hay una celebración
en el colegio.
Una celebración de qué.
Para qué sirve este dolor.
Para qué sirve esta incomodidad impuesta.
Quién podría dormir con tanto brillo
sobre tanta oscuridad.
Libro: Urbe Capensis
Autora: Adriana Bañares
Editorial: Prensas de la Universidad de Zaragoza
Voz: Juan Suárez
Música: Lisi Búa
Vídeo: Ainara Pardal