En 1979, Charlie Mingus, llamó a Joni Mitchell para que participara en una recreación musical que el contrabajista estaba preparando sobre una pieza literaria de T.S. Eliot titulada Four Quartets, aunque terminó pidiéndole que pusiera letra a seis canciones que había escrito expresamente para ella. Una oferta demasiado golosa como para rechazarla, incluso por una artista tan orgullosa como Joni Mitchell, que jamás había trabajado para nadie. Entusiasmada, la canadiense cogió el primer avión a Nueva York, donde residía Mingus, ya gravemente enfermo, casi paralizado por una esclerosis lateral amiotrófica en fase terminal, y ambos decidieron añadir un par de clásicas de Charlie Mingus (una de ellas, la legendaria "Goodbye, pork pie hat") al repertorio del álbum que el contrabajista había imaginado en la voz de Joni. Mingus no llegó a tiempo de escuchar el elepé terminado: falleció el 5 de enero de 1979 en Cuernavaca (México), donde había viajado para recibir tratamiento alternativo a la medicina tradicional, y sus cenizas fueron esparcidas en el río Ganges.
Píntalo de negro. El soul y sus historias
Joni Mitchell y Charlie Mingus
27/07/2019
09:14