Hoy en Por tres razones hablamos de la ola de solidaridad que ha surgido a raíz de la guerra en Ucrania. Las organizaciones y asociaciones de acogida de todo el mundo se están coordinando desde hace más de dos semanas para proporcionar, a las personas ucranianas que huyen del conflicto, bienes de primera necesidad y acogida en diferentes territorios.
Contactamos con la ONG Expoacción, emplazada en Asturias, que organiza desde hace años el programa Vacaciones en Paz para menores provenientes de Ucrania. Según nos cuenta Jorge Enrique González, su presidente, ahora están saturados con las llamadas, ya que 2.400 familias se han ofrecido para acoger familias ucranianas. Asimismo, Liuba, monitora ucraniana que ayuda en la frontera con Polonia, y Maite Pérez, madre de acogida de una niña ucraniana, nos cuentan cómo se están organizando para ayudar.
Desde Cataluña, la ONG Osona amb els nens lleva desde 1997 acogiendo a niños ucranianos y bielorrusos que tuvieron que desplazarse y buscar alternativas después de dejar sus casas tras la explosión de la central nuclear de Chernóbil. Como nos cuenta el vocal de la organización, Federic Lluret, son los propios niños que han venido a pasar veranos en España durante años, los que ahora se han puesto en contacto con la ONG para poder ayudar a sus familias y conocidos que se encuentran en situación de refugiados. Lloret afirma que la prioridad es ofrecer alternativas habitacionales a las personas que llegan a España huyendo de la guerra, sin tener que separar las unidades familiares. En Osona ya son 30 las personas que han podido acceder a una casa y esperan la llegada de otras 30 personas en los próximos días, mientras se coordinan con organizaciones como Cruz Roja y ministerios para poder acelerar la tramitación de su condición de refugiados.
Héctor Pérez, panadero, nos cuenta la historia de cómo él y su compañero Paulo Ribeiro, provenientes de Castroverde, en Lugo, acudieron con sus coches a recoger ucranianos y traerles a España. Pérez cuenta cómo se han organizado a través de un grupo de mensajería instantánea donde otras 30 personas se han ofrecido para hacer lo mismo, y ahora son 20 los vehículos que han partido en dirección a Ucrania para ayudarles a llegar a España. Mané Miranda, otro de los voluntarios, nos cuenta cómo ha sido el viaje hasta Polonia, hacia donde se dirigen con cuatro coches cargados de bienes necesarios y volverán con personas que han salido de Ucrania. David de la Riva, en la misma situación, nos cuenta cómo ha sido el viaje, y que le ha encantado poder ayudar, pero que no repetiría por la dureza del viaje.
También hablamos con Manolo Jiménez, comandante del avión de la aerolínea valenciana Air Nostrum, que ha fletado uno de los dos aviones para traer refugiados, en coordinación con la Generalitat y la ONG Juntos por la Vida.