El despliegue de dos nuevos destructores de la Armada norteamericana en la base de Rota y la reactivación de la retirada de las tierras con contaminación nuclear en Palomares (Almería) constituyeron dos de los asuntos de Defensa que los presidentes Joe Biden y Pedro Sánchez abordaron en su encuentro, que tuvo lugar en la Casa Blanca, el pasado 12 de mayo.
Ya tiene respaldo jurídico el estacionamiento permanente en la base aeronaval de Rota de dos destructores norteamericanos más, con lo que se ampliará de cuatro a 6 el componente naval del escudo antimisiles balísticos de la OTAN.
La firma del acuerdo por la ministra de Defensa, Margarita Robles, y la embajadora norteamericana en España, Julissa Reynoso, tuvo lugar solo cuatro días antes del encuentro entre los presidentes Biden, y Sánchez.
Pero el Congreso de los Diputados -clave en la formación de la voluntad del Estado-, debatirá expost y sin votación esa nueva adenda al Convenio de Cooperación para la Defensa hispano-norteamericano. La ministra Robles solicitó el pasado martes, día 9, su comparecencia ante la comisión de Defensa del Congreso de los diputados donde solo explicará los pormenores de este acuerdo.
Con los dos nuevos destructores, dotados con el potente sistema antimisiles AEGIS, no se va a tener que elevar el actual techo de personal autorizado. El gálibo permanecerá en 4.250 militares y 1000 civiles norteamericanos, incluidos sus familiares. Según Washington, su presencia en Rota inyecta casi 300 millones de euros en la economía local, de zona gaditana.
El primero de los destructores arribará a Rota en 2024 y el siguiente, a partir de 2025.
Pero el de los dos destructores no fue el único asunto relacionado con la Defensa en la agenda de la audiencia de Biden a Sánchez el pasado viernes.
Porque 57 años después del choque de dos aviones norteamericanos, cargados con bombas atómicas, sobre la vertical de Palomares, en la mesa de diálogo entre ambos mandatarios estuvo reactivar el compromiso político de los Estados Unidos, de 2015, para repatriar al desierto de Nevada las toneladas de tierra contaminada por radiación nuclear que aún quedan en ese municipio de Almería.
Rachas de cierzo con fuerza de 22 nudos -13 es el límite de seguridad- impidieron el miércoles 10, el salto masivo de 1400 paracaidistas españoles, franceses, italianos, húngaros y norteamericanos sobre el campo de maniobras de San Gregorio en Zaragoza.
Enmarcada en las maniobras internacionales Defender Europe 23, el objetivo era el asalto a un aeródromo previamente tomado por fuerzas mercenarias afines a un grupo de países -denominado Occasus, en este ejercicio- hostil a los aliados.
Las operaciones de Defender Europe 23, en San Gregorio, están siendo lideradas, por primera vez, por una División no norteamericana, la División Castillejos, del Ejército de Tierra.
Desde Huesca, sede de su cuartel general, se está ejerciendo el mando y control sobre los tres escenarios del ejercicio que tienen lugar en España, Grecia y Estonia, con la participación de fuerzas armadas de 12 países.
Además de estas maniobras multinacionales en Zaragoza, en estos momentos se desarrollan, en diversos enclaves de España, otras que simulan una situación en la que nuestras Fuerzas Armadas deben responder autónomamente a una agresión de alta intensidad sin la ayuda de los países aliados ni de organizaciones multi-laterales.
Y para que este esfuerzo se conozca las Fuerzas Armadas disponen de equipos especializados que se forman en el Curso de Comunicación Social organizado por el ministerio de Defensa. Los treinta alumnos de este 2023 que han asistido como público a la emisión, hoy, en el estudio Música 4, han tenido la oportunidad de interactuar con sus compañeros que fungen como Oficiales de Asuntos Públicos en las misiones españolas en el Líbano, teniente coronel Federico Aguado Martínez, Letonia, comandante Juan Diego Rabadán Barroso, y en Senegal, comandante Víctor Octavio Campos Téllez.
Además, en la mesa del estudio han estado el teniente coronel Manuel Carmona Mariscal, del Mando de Operaciones del Estado Mayor de la Defensa y el teniente coronel Julián Zamora, jefe del Curso de Comunicación Social del Ministerio de Defensa, y el subdirector de los Servicios Informativos de Radio Nacional de España, Juan Tato.