Potentes réplicas del devastador terremoto de magnitud 7,8 del sábado sacudieron Nepal este domingo, provocando el pánico de los supervivientes de una tragedia que ha dejado más de 2.500 muertos, mientras varios países anunciaron el envío de ayuda económica y equipos de rescate. "La electricidad está cortada. Los sistemas de comunicación no funcionan, los hospitales están a reventar y falta sitio para conservar los cadáveres", según el responsable regional de Oxfam, Helen Szoke. El terremoto ha dejado 2.430 víctimas mortales y en torno a 6.000 heridos, según el último balance del Centro nacional de Operaciones de emergencia difundido el domingo.
Mientras, en India las autoridades estimaban en 67 el total de fallecidos y la televisión estatal china dijo que 18 personas habían muerto en la región del Tíbet.
Se espera, no obstante, que el balance de víctimas siga creciendo, pues aún hay muchas zonas aisladas por el terremoto, el peor que ha golpeado Nepal en los últimos 80 años. La Cruz Roja mostró su preocupación por los habitantes de las zonas rurales aisladas cercanas al epicentro del terremoto. "Prevemos pérdidas en vidas humanas y daños materiales considerables", advirtió Jagan Chapagain, director para Asia-Pacífico de la Federación internacional de sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR). "Las carreteras están dañadas o bloqueadas por ríos de barros. Las comunicaciones están rotas, lo que nos impide contactar con las ramas locales de la Cruz Roja y obtener informaciones verídicas", explicó. "Hemos visto escenas terribles de destrucción, hospitales que han sido evacuados y pacientes atendidos en el suelo, casas y edificios demolidos y carreteras con grietas abiertas", narraba Eleanor Trinchera, coordinadora de Caritas Australia. Las primeras incineraciones en masa, para alejar el riesgo de enfermedades e infecciones, se hicieron en el distrito Pashupatinath de Katmandú. Las réplicas también provocaron nuevas avalanchas en el campamento base del Everest, según montañista presentes, justo después de que los helicópteros de salvamento evacuasen a los heridos del alud del sábado, que mató al menos a 18 personas. 26/04/15