Más de 90.000 niños, nacidos con VIH en países de escasos recursos, morirán antes de cumplir los dos años. Representan el cincuenta por ciento del total de bebés que, cada año, debutan en el mundo con el virus de inmunodeficiencia adquirida. La mayoría, infectados por transmisión de madre a hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia. El VIH se puede prevenir con un tratamiento antirretrovírico, pero, si no, con toda probabilidad, evolucionará a sida.
Con el fin de mitigar la epidemia mundial de VIH infantil en los países empobrecidos, el Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid investiga, desde hace años, con células procedentes de la República Democrática del Congo, Guinea Ecuatorial, Etiopía, otros países de América Latina y el Caribe. Para sensibilizar a la sociedad y recabar fondos, el centro sanitario ha lanzado una campaña con el lema "Que cumplan muchos más".
Radio Exterior de España ha conversado con la doctora África Holguín, jefa del Laboratorio de Epidemiología molecular VIH-1 del Hospital Ramón Y Cajal.