Espigoladors, una fundación contra desperdicio alimentario

Hay productos alimentarios a los que se desdeña y desecha por su aspecto físico, entre otras muchas razones. Su tamaño o deformidad hace que no sea apto para los cánones de consumo a los que estamos acostumbrados. Por eso muchos acaban desperdiciados en el campo o en vertederos, cuando en realidad su falta de estética no merma su poder nutritivo.
Eso lo sabe muy bien Mireia Barba, directora de Espigoladors, una organización sin ánimo de lucro que lucha contra el despilfarro alimentario y que comercializa productos bajo la marca “Es imperfect”. En este caso, dando la vuelta al refrán porque “lo imperfecto sí puede ser amigo de lo bueno”.
Belleza y fealdad. Hoy hablamos de ambas percepciones con esta emprendedora, radicada en la localidad barcelonesa de el Prat de Llobregat, y con Joaquín Araújo, viajero empedernido que encuentra el valor de lo pequeño tanto en grandes ciudades como en aldeas humildes. Y por eso nos hace aterrizar en algunos eventos de lo más peculiar, como por ejemplo, el primer Festival de la Belleza.