Si pudieras elegir en qué tipo de ciudad te gustaría vivir, seguramente dirías que en aquella que tuviera menos contaminación y ruido, más zonas de esparcimiento, más parques, jardines y árboles, y más espacio público. Esto, que puede parecer una simple lista de deseos, "es un derecho ciudadano".
Si Naciones Unidas implementó hace dos años el derecho a un medio ambiente sano, ¿podremos por derecho exigir ciudades que nos proporcionen una mayor calidad de vida? Ya hay normativas que obligan a tomar medidas, como la de aprobar zonas de bajas emisiones, pero las ciudades están fallando: parece que solo un pequeño porcentaje de las localidades que deberían tenerlas ya activas en nuestro país, ha cumplido con la tarea.
Estos días están en plena ebullición estos temas. Si ayer se debatían en Bilbao, bajo el paraguas de la Defensoría del Pueblo Vasco, para los próximos días, en la Semana de la Movilidad Sostenible, se prepara la presentación de un manifiesto que persigue municipios más habitables y saludables.
De todo ello conversamos con Carmen Duce, coordinadora de la plataforma Clean Cities en España, y con Ana Montalván, directora de la red Ciudades que Caminan.