Nunca se fue y ya está de vuelta. Umberto Bossi se presenta a la reelección de la secretaría general de la Liga Norte.
El histórico fundador del partido secesionista dimitió el 5 de abril tras una semana de filtraciones sobre el trabajo de los fiscales de Milán, Nápoles y Reggio Calabria, que investigaban las cuentas del partido. Dinero público habría servido para el mantenimiento de toda la familia.
"Si no me presento, la gente creerá que no estamos unidos", ha anunciado en un mitin en Bérgamo. En ese acto, el actual líder provisional del partido y ex ministro del interior, Roberto Maroni, proclamó que la prioridad de su partido es terminar con el gobierno de Monti. La Liga ha sido en las últimas legislaturas la piedra angular que sustentaba los gobiernos del ex primer ministro Silvio Berluscon.