La casa

Un soldado malherido yace en la nieve necesita morfina. Ya es demasiado tarde. Dos soldados del ejército alemán llevan consigo un prisionero noruego. Se dirigen hacia el fiordo, donde un barco les espera para evacuarlos. La brújula está estropeada y tratan de orientarse. La nieve cubre el paisaje y la larga marcha los agota. A través de los prismáticos descubren la casa que surge en medio del bosque. Llegan a ella y desde el interior se escucha el sonido de una radio. La bandera noruega sigue izada en el exterior. Hay algo oculto tras las ventana y cruces en las paredes. Apagan la radio y se oyen crujidos en la mansión. La figura de una mujer asusta al soldado Fleiss y el teniente Kreiner ordena que tome su arma. Hay una habitación con dos runas grabadas en la puerta de un armario.