La cocina española es el resultado de la fusión entre las cocinas púnica, romana, visigoda, judía, musulmana y americana. ¿Has pensado en la relación entre Contrarreforma religiosa y que España tenga 200 recetas de bacalao? ¿Y que Francia tiene una cocina nacional por la dictadura napoleónica, que decidió qué era Francia, mientras que la permisividad madrileña hizo que se integraran todas las cocinas regionales hasta ser imposible crear una cocina nacional? Lo cuenta Miguel Ángel Almodóvar en Eso no estaba en mi libro de Historia de la cocina española, quien muestra cómo seleccionar platos para hacer una cocina nacional es el inicio de una guerra. Almodóvar afirma que lo último que tomó Jesucristo antes de morir fue gazpacho (y lo último tras resucitar fue un espeto de sardinas).
El mexicano Juan Patricio Lombera nos propone Los conspiradores, de Jorge Ibargüengoitia; la historia del descontento de fuerzas sociales y políticas del México virreinal que les lleva a rebelarse contra España. Se encarga de desmitificar la gesta heroica de la Independencia. Los conspiradores se reúnen en clandestinidad, intrigan, reclutan amigos, fraguan planes, fabrican armas…
Hablamos con Fernando Alonso Barahona de El cine español en la era de Franco. Al poco de acabar la guerra civil se pasa de hacer cine proselitista a hacer cine de verdad. Vinieron a grabar películas en España estrellas que habían sido prohibidas en la caza de brujas de EE. UU. por ser rojos. A la dictadura no le molestaba tanto la crítica de Bienvenido Mister Marshall, Viridiana o Muerte de un ciclista, como que se vieran tetas. El régimen estaba rodeado de cineastas comunistas, socialistas, anarquistas y cristianos de bases.
Eugenia Kleber ha presentado en Cataluña la antología Mujeres en la Historia, la Antigüedad y lo presentará el día 23 en Sant Jordi; nos habla de este libro que recoge vida de grandes mujeres en Grecia, Alejandría, Roma, Egipto y Asia. Se puede ser hetaira y pasar a la historia.
