Condenadas a la falta de libertad

¿Por qué las víctimas de la violencia machista tardan tanto tiempo en denunciar? Según un estudio reciente de la Delegación del Gobierno, desde que comienza el maltrato hasta que una mujer pide ayuda, pueden pasar hasta casi nueve años. Por diferentes motivos: el miedo al agresor, porque creen que podrán resolverlo por sí mismas, o lo peor, porque realmente no se reconocen como víctimas. La falta de recursos económicos, la vergüenza a contar lo que ocurre, desconocer adónde dirigirse y cómo pedir ayuda, y el miedo y desconocimiento al proceso judicial, fueron otros de los motivos expuestos por las encuestadas. Modesta Carne, superviviente del maltrato, narra su caso en primera persona, y explica cómo la lentitud de la justicia impide que pueda dejar atrás esa terrible etapa de su vida.

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