Ayer debía haber cumplido 85 años Roy Orbison (Roy Kelton Orbison), nacido en Vernon, Texas, el 23 de Abril de 1936. Esa es una muy buena razón para que sus canciones pasen a "vestirse" con #Americana y reunamos muchas de sus canciones bajo ese paraguas acogedor en el que nos refugiamos cada fin de semana en la sintonía de Radio 3. Cuando Roy Orbison murió en Diciembre de 1988 con 52 años, acababa de completar el álbum Mystery Girl, considerada como su última grabación en estudio y había dejado algunas canciones en diferentes estados de producción. La leyenda de “The Big O” nacía para la posteridad.
Esta vez, en TOMA UNO hemos querido recrearnos en canciones como "You Got It", de la que Bonnie Raitt realizó una versión imponente en 1995 para la banda sonora de la película Boys on the Side. También nos han acompañado The Sweetback Sisters que asentadas en el barrio neoyorquino de Brooklyn y sin ninguna relación de parentesco, tienen evidentes referencias de la vieja escuela de la country music y el rockabilly. Pero también hemos recurrido a Johnny Cash, que rememoró “Go! Go!Go!”, que ha pasado a ser conocida como “Down The Line” en sus posteriores versiones y que resultó ser la primera composición del recordado artista. Claudette, la primera mujer de Roy Orbison, quedó inmortalizada en aquella canción que los Everly Brothers grabaron antes que su propio autor. De hecho, la versión original no aparecería hasta casi 30 años más tarde.
Músicos como John Mellencamp le cantaron en sus comienzos, Rodney Crowell lo hizo a mitad de los 90 y Lacy J. Dalton una década antes. Hasta el bluegrass se rindió a su magisterio a través de la Cox Family. Hasta Mandy Barnett o Jeff Lynne, en diferentes tableros sonoros, se han atrevido a circular por caminos líricos como hizo el mítico artista tejano. Willie Nelson también fue elegido por Roy Orbison como compositor y Randy Travis le cantó. Incluso Waylon Jennings se acordó de él en su primer oficial. Chris De Burgh y Chris Isaak han sido los dos últimos ejemplos del respeto que los más diversos artistas tienen por un músico legendario.
Los cronistas del rock se han preguntado muchas veces cual fue el secreto, el misterio, de aquel tejano siempre vestido de negro, con sus ojos ocultos tras unas gafas oscuras y estático sobre el escenario. Era una especie de antítesis de lo que se entiende por una “estrella del rock”, que logró poner de acuerdo a todos.