Han pasado 80 años desde que el 9 de Octubre de 1940 viniera al mundo en la portuaria ciudad de Liverpool John Lennon, cantante, compositor, guitarrista y activista político. Un personaje indispensable para entender el desarrollo de la música popular en cuanto a sonido, estilo y actitud. Fue el más decidido y personal de los cuatro miembros de los Beatles, incansable buscador de nuevas sensaciones y un rebelde por naturaleza, lo que le llevó a situaciones comprometidas a lo largo de su vida.
“Imagine” es, sin duda, la canción más representativa de toda la carrera musical de John Winston Lennon, a quien recordamos hoy, cuando se cumplen 70 años desde su nacimiento. Después de todo lo que se ha comentado en estas fechas tan solo nos queda escuchar una emocionante versión realizada por Emmylou Harris de este tema, que fue uno de los censurados por la Administración Bush tras los atentados del 11 de Septiembre de 2001 y que dejaba mensajes como:
Imagina que no hay países. No es difícil de hacer. Nada por lo que matar o morir. Y tampoco ninguna religión…
John Lennon incluyó originalmente “Grow Old With Me” en su álbum Milk And Honey. Una línea de la letra estaba tomada del poema “Rabbi Ben Ezra”, de Robery Browning, y la canción venía a expresar los sueños de John sobre que le hubiera gustado hacer cuando envejeciera. Sueños simples como los de vivir para siempre una vida sencilla con la persona querida. Mary Chapin Carpenter interpretó esta canción en el álbum Working Class Hero… A Tribute To John Lennon.
“Nowhere Man”, que pertenecía a Rubber Soul, el sexto álbum de los Beatles editado en 1965, parece definir en un principio el carácter del propio John Lennon. Tras admitir posteriormente que consumía drogas, el personaje fue analizado desde todos los puntos de vista posibles por los expertos. Como conclusión, aquél “hombre de ninguna parte” podía ser desde un “camello” al capitán del Submarino Amarillo. De forma casi sorprendente, Randy Travis, uno de los baluartes de la mejor etapa de los neotradicionalistas del country, la incluyó en un álbum imprescindible de homenaje a los Fab 4 como fue Come Together:America Salutes The Beatles publicado hace 25 años.
Con Kris Kristofferson y Willie Nelson en los coros, Chris Stapleton realizó esta poderosa versión de “You’ve Got To Hide Your Love Away”, una canción que compuso y cantó como solista John Lennon en una etapa en la que el músico estaba especialmente influido por Bob Dylan. La canción es un ejemplo temprano de la autorreflexión de John en su escritura, que había comenzado con canciones como "I'm a Loser" en el verano de 1964. Esta canción, compuesta indudablemente por John Lennon, es uno de los cortes más sencillos del cuarteto al que solo se le añadió una flauta final en su versión original, incluida en la banda sonora de Help!.
Los Beatles acababan de completar su segunda gran gira de conciertos por Estados Unidos cuando empezaron a grabar Beatles For Sale en pleno agosto de 1964. Cuando uno escucha con cierto detenimiento aquel disco es fácil de entender que el cuarteto estuviera exhausto en algunos de los cortes. Cuando John Lennon compuso “I’m A Loser” las influencias de Bob Dylan en su forma de escribir eran evidentes, como se demuestra en la utilización de ciertas expresiones y matices propios del genio de Minnesota en aquella época. En 1977, Doug Kershaw publicaba su álbum Flip, Flop & Fly con esta versión absolutamente campera.
Help! fue uno de los momentos mágicos en la historia de los Beatles. Empezaron trabajando bajo el título de Beatles Phase II, pero muy pronto pasó a denominarse Eight Arms to Hold You (Ocho brazos para atraparte) hasta que se decidieron por Help!. Al parecer, la película está inspirada en el clásico de los Hermanos Marx Sopa de ganso, aunque en diferentes momentos encontramos alusiones satíricas de las series de James Bond como ocurre con el comienzo del tema central. De hecho, por entonces, Help! y las cintas de las aventuras del agente 007 tenían la misma distribuidora, United Artists, y llegaron a utilizar algunos sonidos muy característicos que no vieron la luz en el mercado europeo por entonces. Como canción, “Help!” fue una de las primeras canciones del cuarteto en que no se hablaba del chico que encuentra a la chica y la pierde después. Lennon súplica ayuda, comparando la situación en la que se encontró en los primeros tiempos, menos complicados. Dolly Parton nos sorprendió a todos llevándola al terreno del bluegrass.
Lorrie Morgan, realizó hace años una extraordinaria versión de “Eight Days A Week”, que originalmente contaba con John Lennon como solista, abría la segunda cara del LP Beatles For Sale, que empezó a gestarse cuando habían terminado su segunda gran gira por los Estados Unidos. Se ha especulado sobre si el tema estaba dedicado a Brian Epstein, porque en aquellos tiempos tenía que dividirlo para atender como manager a multitud de grupos y solistas, de tal forma que trabajaba “ocho días a la semana”. La canción fue compuesta por John cuando el grupo estaba preparando su segunda película, que en principio iba a llamarse Eight Arms To Hold You y que, definitivamente, llevó el nombre de Help!.
“I Feel Fine” nos sirve también para recordar que esta canción se editó como single en 1964, con reservas de tres cuartos de millón de copias, como continuación de “A Hard Day’s Night”. Fue el octavo single del grupo y el sexto No.1 consecutivo y, sin embargo, no apareció en un álbum oficial hasta que vio la luz Past Masters. Volume One. Nativas de Manhattan Beach, al sur de California, y con una educación que mezclaba las tradiciones polacas y de Oklahoma, las hermanas Oliver, Kristine y Janis, empezaron a cantar juntas desde que tenían 7 y 9 años. Sus primeras apariciones musicales fueron en el coro de la iglesia local para llegar a la high school con un cierto sabor vaquero. Sus influencias incluyen a Dylan, Everly Brothers, Linda Ronstadt, Hank Williams, Bob Wills, el bluegrass y, como no, los Beatles. El segundo álbum de la familiar pareja con el nombre de Sweethearts Of The Rodeo, One Time, One Night, nos dejó esta versión de “I Feel Fine”, que fue editado en single en 1988, cinco años después de que Janis Oliver hubiera encontrado a Vince Gill, por entonces miembro de Pure Prairie League. Fue su primera mujer.
“I Don’t Want To Spoil The Party” perteneció originalmente al álbum Beatles For Sale, editado en 1964. Estamos ante otra canción de Lennon con referencias a su infancia y sus relaciones familiares. En este caso tiene que ver con la alienación y un cierto sufrimiento. Ya que la chica a la que espera le da platón, decide dejar la fiesta para no estropearla a los demás. Tanto la letra como la música tienen claras reminiscencias de temas del estilo de "No Reply" y "I'm A Loser". En la versión original George Harrison fue solista junto a Lennon. Rosanne Cash incluyó esta espléndida versión en su recopilatorio Hits 1979-1989 logrando el primer puesto de las listas de singles de country… el último de su carrera por el momento.
En el tiempo de TOMAUNO de hoy, nos visitan los más variopintos artistas de la escena de la Americana en sus distintas facetas. Así, Herb Pedersen recuerda un “Paperback Writer” que fue grabado durante las sesiones de Revolver y se publicó como single en Junio de 1966, un par de meses antes de la edición del álbum, no publicándose en ningún Lp hasta la edición de Past Masters, Volume Two en el 88. La letra está inspirada por los dos libros de Lennon, “In His Own Write” y “Spaniard In The Works”, hablando del deseo de Paul McCartney de convertirse también en escritor.
Steve Earle entendió la importancia del legado de los Beatles y llegó a realizar una versión muy particular de “I’m Looking Through You”, una canción que revelaba la influencia que Little Richard y Buddy Holly tuvieron en primeros escarceos del cuarteto de Liverpool, pero mantenidas durante el tiempo. Pertenecía a uno de sus álbumes más representativos, Rubber Soul, donde los llamados Fab 4 empezaron a tomar direcciones alternativas en su sonido.
Los Lonely Boys es un trío de hermanos de San Angelo, Texas, que combinan elementos de rock and roll, blues, soul, country y música tejana siguiendo la tradición de su padre. Los hermanos Garza lo llaman Texican Rock’N’Roll. En la versión realizada originalmente por John Lennon estuvo acompañado de Elton John. “Whatever Gets You Thru The Night” está inspirada en una frase de un pastor evangelista durante un programa nocturno de televisión.
En el álbum Instant Karma: The Amnesty International Campaign to Save Darfur, Jakob Dylan, hijo de Bob Dylan y líder de los Wallflowers, grababa una versión de “Gimme Some Truth” junto a Dhani Harrison, hijo de George Harrison, que tomó el lugar de su padre en la canción, tocando la guitarra solista. En "Gimme Some Truth" Lennon expresa su frustración con los políticos, especialmente con el entonces presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, a quien llama "Tricky Dicky", un apodo que se utilizaría tras el escándalo Watergate. Fue compuesta tras de la Guerra de Vietnam e incluida en el álbum Imagine de 1971. Ayer mismo, conmemorando los 80 años del nacimiento de John Lennon, se editó Gimme Some Truth. The Ultimate Mixes. Bajo ese nombre, Yoko Ono y su hijo Sean han seleccionado 36 canciones de la carrera en solitario de Lennon por orden cronológico.
El álbum Imagine es una referencia evidente en la discografía de John Lennon, por lo que versionar algunas de sus canciones ha sido especialmente atractivo. Aun siendo una de las interpretaciones más sólidas de la carrera de Lennon, "Oh My Love" es una de las menos conocidas. La compuso junto a Yoko Ono durante las sesiones de grabación del llamado White Album de los Beatles con el apoyo de George Harrison con su guitarra, como ocurrió en buena parte de los cortes de aquel disco. La canción tiene que ver con la terapia para superar sus traumas de la infancia. Jackson Browne la interpretó de esta forma en el proyecto Instant Karma: The Amnesty International Campaign to Save Darfur.
Doug Dillard y Gene Clark unieron fuerzas para realizar dos aventuras discográficas que han pasado a la historia como referencias fundamentales de la combinación de géneros musicales apegados a la tradición, pero con una apuesta de futuro arriesgada y positiva. En aquella segunda entrega, titulada The Fantastic Expetion Of Dillard & Clark, escogieron para cerrarla un tema como “Don’t Let Me Down”, que fue la cara B de “Get Back”. Las dos canciones iban a aparecer en un disco titulado precisamente Get Back que los Beatles estaban intentando grabar en 1969 en los estudios de Apple en Savile Row. El disco se abandonó, pero el single se publicó en el mes de abril.