"Estoy muy contento de la etapa de hoy, si me llegan a decir antes de salir que le íbamos a meter 1:10 al líder, me hubiera costado creerlo", dijo Alberto Contador tras la etapa de hoy.
"Mi equipo ha estado extraordinario. Al principio nos hemos mantenido tranquilos porque Alejandro Valverde había tenido algún percance y decidimos no colaborar, pero al final hemos visto a la gente muy al límite, mi equipo estaba muy fuerte y hemos decidido probar, porque veíamos a la gente en la cuerda floja".
Alberto admitió que no pensaba que se pudiera hacer tanto daño. "Hubo un rato que estábamos sólo a 10 segundos, pero tengo que decir 'chapeau' para todos mis compañeros porque han demostrado la unión del equipo Saxo-Tinkoff que ha hecho Bjarne Riis".
Contador, a la pregunta de si había demostrado que el Tour no se ha terminado, dijo que en estos momentos, "de estar a 3:57 a estar a 2:45 no cambia tanto la clasificación general. De todas maneras hay que ir al ataque en los Alpes, pero es un minuto que hemos recortado de la diferencia de la contra reloj. El Tour sigue siendo difícil, pero todavía no se ha terminado, pueden pasar mil cosas. De momento hay que descansar, que mañana será otro día".
Sobre la decisión de lanzar el último ataque, Alberto comentó que su equipo le llevó "todo el tiempo protegido del viento, porque era muy peligroso ir en el grupo, hasta que hemos visto que los equipos más importantes flaqueaban y como mi equipo es muy potente, hemos decidido ir hacia delante. Bennati ha hecho un kilómetro como si fuera en una moto y ha roto el grupo en mil pedazos".
Alberto repitió que todos los días "pueden pasar mil cosas, en el ciclismo influyen mil factores y eso es importante tenerlo presente", dijo a modo de explicación de los sucedido. "Estoy muy contento por mi equipo y por la imagen que hemos ofrecido, ha estado inmenso. Hemos demostrado que todos tenemos el mismo objetivo en la cabeza, luchar por la victoria, y ha sido un gran día".