En el siglo XII apareció un personaje muy popular en Inglaterra. Este encarnaba las demandas de justicia de las clases oprimidas. Robaba a los ricos para dárselo a los pobres. ¿Era un bandido? O ¿era un benefactor de los humildes?
Robin Hood es el nombre de este proscrito cuya historia y leyenda se divulgó de generación en generación hasta nuestros días.
La literatura hizo que se convirtiera en el personaje de ficción más popular en todo el mundo. Las andanzas de este rebelde, que se ocultaba en el bosque de Sherwood, junto a su banda, habitan en el imaginario colectivo.
Este personaje tiene todos los ingredientes para atraer a la gente, en especial a los niños. Era un hombre bueno que robaba para que los pobres pudieran comer, también un justiciero que protegía a los campesinos de los abusos de sus señores. Siempre se burlaba de los malos, sobre todo del Sheriff de Nottingham. Vivía en el bosque y obligaba a pagar impuestos a todos los que quisieran atravesarlo. Amaba a Lady Marian, una hermosa joven, prima del rey Ricardo, con la que se casa.
Fernando Orea, periodista y un entusiasta de este personaje, nos llevará hasta Inglaterra para descubrir la andanzas de Robin Hood y de su banda de proscritos.