Despídete de Viktor Ambrus

En mayo de 1957 Viktor Ambrus decidió acabar con todo su sufrimiento y se quitó la vida. Su muerte conmocionó al barrio y hundió a Angélica Valdés, su esposa, que se sintió culpable de lo sucedido.

La vida de Viktor no fue fácil: postrado en una silla de ruedas, tuvo que dejar su país huyendo del comunismo húngaro. Vivió el nazismo, II Guerra Mundial y el Comunismo, siempre atormentado por su pasado.

Pero Angélica lograba hacerle feliz, olvidar todo el dolor, era el motor de su vida. Ante la posibilidad de que fuese inculpada por el crimen que él cometió y la grave enfermedad que sufría, el anticuario decidió suicidarse para liberar a su mujer. Fue un acto de amor hacia Angélica.