Cuando, en 2017, estalló el #MeToo, una ola de denuncias de agresiones sexuales sin precedentes salieron a la luz en el mundo occidental.
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16/07/2024 00:52:03Cuando, en 2017, estalló el #MeToo, una ola de denuncias de agresiones sexuales sin precedentes salieron a la luz en el mundo occidental.
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16/07/2024 00:52:03Disponible hasta: 15-08-2024 20:00:00
Cuando, en 2017, estalló el movimiento #MeToo, una ola de denuncias de agresiones sexuales sin precedentes salieron a la luz en el mundo occidental. Las mujeres se echaron a las calles masivamente para visibilizar su particular “basta ya”. La reacción no se hizo esperar. Las redes se inundaron de la misoginia más virulenta jamás vista. Navegar por internet, se convirtió en una actividad de riesgo para las mujeres. “¡Las mujeres se han convertido en putas!”, grita en un vídeo un ciberacosador. “Si no puedo teneros, chicas, os destruiré”, advierte otro de ellos en “Misoginia en la era digital”. Las mujeres son cada vez más relevantes e influyentes en el ámbito público y “muchos hombres piensan que eso es demasiado”, asegura la expresidenta del Congreso italiano, Laura Boldrini, víctima de ciberacoso por defender los derechos de las mujeres desde la política. De entre sus agresores destacaban las primeras espadas de la política italiana, Beppe Grillo, el líder del Movimiento Cinco Estrellas y Matteo Salvini, el viceprimer ministro. Pero fue el alcalde de la localidad de Pontinvrea quien escribió en las redes “enviemos violadores a casa de Boldrini para que vuelva a sonreír”, denuncia la expolítica.