Después de Filomena

Las nevadas más intensas en cinco décadas, seguidas de una ola de frío con temperaturas mínimas récord, han paralizado esta semana media España. Primero fue Filomena, una tormenta gigante que azotó el sur y el centro de la península y las islas Canarias. Por primera vez desde su introducción en 2007 se activó el grado más alto de alerta meteorológica en las provincias de Madrid, Guadalajara, Cuenca, Albacete y Toledo.
Luego vinieron las heladas. El resultado: transporte paralizado, 20.000 kilómetros de carreteras cortadas, 2.500 personas atrapadas en vehículos rescatadas por los servicios de emergencia, colegios y universidades cerrados, hospitales saturados...
El equipo de ‘Informe Semanal’ ha estado con los equipos de salvamento, con personas sin hogar que duermen a la intemperie a temperaturas bajo cero, en asentamientos sin luz, ha visitado hospitales, acompañado a ganaderos y residentes del medio rural... A la emergencia meteorológica se ha sumado, además, un repunte de los casos de coronavirus después de las fiestas navideñas que ha obligado a endurecer las restricciones en algunas Comunidades.