FOMO: el miedo a perderse algo en las redes sociales

Es lo que se conoce como FOMO, un miedo que impulsa a un consumo excesivo y que puede provocar que se ignoren las relaciones reales. De hecho, ya se están viendo resentidas. Cada vez son más los jóvenes que viven pegados a dispositivos como estos conectados a Internet.

El Servicio de atención en adicciones tecnológicas de la Comunidad de Madrid asegura que las horas frente a los dispositivos, dicen, son clave: "Dos horas diarias suelen ser buenas para el ocio. A partir de ahí, cuantas más horas más en riesgo está el menor".

De media, reciben al día entre tres y cuatro casos. Tras la pandemia tienen incluso lista de espera. Una situación similar a la que pasa el Servicio de Psicología de la Universidad de Murcia: han visto duplicado su número de pacientes. José Antonio es director del servicio de psicología de la Universidad de Murcia: "Empiezan a tener problemas de concentración, de memoria. Hay que tener en cuenta que las redes sociales son muy atractivas y el mundo real empieza a resultarles aburrido", ha explicado el profesor.

Y es que las nuevas tecnologías cambian por completo su percepción de la realidad: "A veces las redes sociales presentan un mundo ficticio, irreal. Un mundo que cada vez atrapa a más jóvenes", ha concluido el profesor.