Volver al trabajo con COVID persistente

Reabre el ocio nocturno, la vacunación avanza a buen ritmo, y los contagios siguen bajando. Mientras todo esto sucede, hay personas que llevan meses sufriendo las secuelas de la COVID. Son los que se conoce como enfermos de COVID persistente, una dolencia que está reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que implica seguir presentando síntomas notables meses después de superar el virus. A eso, se suman los contratiempos que afrontan los que cumplen un año de baja médica cuya situación ahora depende del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), que es el que decide si les alarga la baja. Algo que no se está produciendo en la mayoría de casos, según algunos afectados como Miriam. Ella es farmaceútica, tiene 40 años y se contagió de coronavirus el 14 de abril de 2020. Tuvo neumonía bilateral, pero no estuvo hospitalizada. Un año más tarde padece todavía síntomas como dolores musculares, dolores articulares, cefaleas, dolor de pecho y hormigueo en las manos. Va a rehabilitación por la mañana y por la tarde. Tiene informes de todo que acreditan su situación. Sin embargo, el INSS el 14 de mayo le ha dado el alta de manera sistemática. Dice que se han pasado todos los informes por encima y que ella no está en disposición de volver a trabajar porque en su día a día convive con el dolor. En ‘La Hora de La 1’ ha reivindicado su situación y la de las personas que siguen sufriendo dolores más de un año después.