¿Por qué las vacas contribuyen también al cambio climático?
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15/10/2019 00:01:47¿Por qué las vacas contribuyen también al cambio climático?
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El ganado de rumiantes (caprino, ovino y, sobre todo, vacuno) contribuye con sus emisiones al calentamiento global en torno a un 4%, similar al impacto mundial de la aviación. El motivo es que los eructos de las vacas -no tanto sus ventosidades- son una poderosa fuente de metano, un gas de efecto invernadero menos abundante que el dióxido de carbono pero mucho más dañino por su facilidad para atrapar el calor del planeta. Una vaca, a lo largo de un año, fomenta el cambio climático de la misma manera que un coche familiar, y todos estos cálculos no contemplan las emisiones derivadas de producir su alimento, que son aún mayores.
Para mitigar la contribución gaseosa directa del ganado a la crisis climática, científicos del INIA (Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria) han decidido averiguar qué variantes genéticas de los animales se asocian con una mayor emisión de metano. Sus resultados se incorporarán en el programa nacional de mejora genética por cría selectiva, para que los terneros del futuro gocen de una digestión más sostenible. No se contempla modificar directamente el ADN de las vacas, ya que esta práctica está prohibida actualmente en casi todos los animales destinados al consumo. Aún así, solo por selección genética estiman que será posible reducir las emisiones de metano un 10% en diez años.