La Gran Manzana inspira al gallego para su colección de otoño e invierno de 2012 a 2013. Verino ve en ella un crisol de culturas y el escenario de la libertad, y, libremente, mezcla aires de los años 20 con otros de los 70 para crear una colección de contrastes.
Para las prendas diurnas sigue tendencia ECO de la colección de primavera y verano 2012, y colorea en tonos tierra, arena y corteza. Destacan las parkas para los chicos en distintas versiones y con aplicaciones de piel, el gris en total look que es perfecto para un armario mixto y los impermeables transparentes con toques de chantilly que permiten lucir jerseys de punto con detalles de visón.
Verino quiere que sus prendas se conviertan en un buen fondo de armario, clásico, atemporal, y apuesta por tejidos de buena calidad, intentando mantener los precios a raya, para que la compra se convierta en una buena inversión.
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