La guerra de Ucrania seguirá marcando la agenda global en 2023

Si el mundo fuera como una partida de billar, la guerra de Ucrania sería la bola blanca que ha acelerado "un montón de cambios que ya están en curso", según explica Carme Colomina, investigadora del CIDOB.

Primero, la reconfiguración de las alianzas globales. Habrá que tener en cuenta, más que nunca, a "los otros", a potencias como la India, Turquía o los BRICS que reclaman su lugar en el tablero geoestratégico.

En nuestro entorno, la Unión Europea tendrá que decidir qué relación quiere tener con Rusia y habrá que pensar en cómo poner fin a la guerra. Esta inestabilidad global afectará a los ciudadanos que seguirán protestando, pero creen que las movilizaciones se fragmentarán y tendrán menos influencia.

Falta la bola negra. Para el CIDOB, podría ser el riesgo nuclear. Es el elemento sorpresa que podría hace saltar por los aires todas estas predicciones.

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