Sinopsis
El mayor terremoto en el oeste de Japón desde que hay registros, de magnitud 7.5, ha tenido más de una docena de réplicas durante varias horas. La alerta de tsunami ha estado activada en toda la costa oeste, se temían olas de hasta 5 metros, pero, según las autoridades, ninguna central nuclear está en peligro. -- Un cohete pirotécnico provocó un incendio en un bloque de viviendas en Errentería, Guipúzcoa, que obligó a desalojar a todos los vecinos poco después de las campanadas. Se vivieron momentos de mucha tensión porque el fuego se propagó rápidamente por uno de los patios del edificio donde están los tendederos. No ha habido heridos y la mayoría ha podido volver a sus casas de madrugada. -- Por lo demás, Nochevieja sin más incidentes graves que en RTVE celebramos con Ana Mena, Jeni Hermoso y Ramón García. Muchos han tirado de tradición, tomando las uvas con la familia frente al televisor. Otros han querido estrenar el nuevo año de una forma más original. -- Después de la fiesta, llega la temida cuesta de enero. En 2024 suben la luz, el gas, la telefonía, los peajes y los alquileres. Las hipotecas, en cambio, van a dar un respiro. El año arranca también con la subida de las pensiones. -- En el calendario político de 2024 tenemos apuntadas dos elecciones autonómicas, unas europeas, pero, sobre todo, la tramitación en el Congreso de la Ley de Amnistía que, salvo sorpresas, estará aprobada en verano. -- El nuevo año 2024 no trae esperanzas de paz en Gaza, ni tampoco en Ucrania. Durante 11 horas, Rusia ha bombardeado con drones distintas ciudades de Ucrania. El conflicto cumple dos años en febrero, con una contraofensiva estancada. En Gaza, parece lejano un nuevo alto el fuego. -- Cada 1 de enero hay un sonido y una imagen que no faltan en los telediarios: Kylian es el primer bebé del año. Ha nacido en Vigo. No quiso esperar y llegó con las campanadas. Unos 26 segundos después nacía Carla, en Salamanca. -- La música la ha vuelto a poner la Filarmónica de Viena con los valses y polkas del concierto de Año Nuevo. Esta vez bajo la batuta del alemán Christian Thileman, que lo dirige por segunda vez.
