Radicalización y violencia, cuando el odio se convierte en el hogar soñado

Malinas, ciudad belga de 85.000 habitantes, un o de cada 5 es musulmán y ninguno de ellos ha ido a combatir a Siria. Es la excepción en Bégica, el país europeo que más yihadistas exporta. Su alcalde Bart Somers, está en Madrid para explicar su fórmula. Trabajo en las comunidades y fomento de la estima por la pertenencia a ellas.

La lista de víctimas del yihadismo es extensa: Nueva York en 2001, España en 2004, Reino Unido en 2005 , París en 2015, Bruselas en 2016. csai Más de 3.500 muertos solo en Occidente, los más visibilizados por los medios. Luego el drama de cientos de miles de asesinados en Asia, Oriente Medio y África. La gran mayoría de los atacantes eran extremistas radicalizados, captados y convertidos por reclutadores del terror. Muchos de ellos ciudadanos de democracias occidentales, musulmanes supuestamente integrados, lobos solitarios o combatientes conversos a las órdenes de Al Qaeda o el EI. ¿Por qué ocurre esto?

La desradicalización de extremistas violentos y la prevención de este fenómeno se ha convertido en un foco de interés prioritario para gobiernos y cuerpos de seguridad. Hablamos con Sarabia en el IV Foro Elcano sobre Terrorismo Global organizado este martes por el Real Instituto Elcano en Madrid. El acto se celebra cuando se ha cumplido un año de los atentados yihadistas de París, que dejaron 130 fallecidos y centenares de heridos.