EEUU redujo la tasa homicidios

Estados Unidos ha reducido a la mitad la tasa de homicidios desde 1991, al pasar de 748 a 399 los crímenes violentos por cada 100.000 habitantes, según un informe divulgado hoy por el Instituto para la Economía y la Paz.

"Los últimos veinte años han visto una reducción sustancial y sostenida de la violencia directa en Estados Unidos", según el estudio, referido a 2011 y que analizó las estadísticas de crimen, armas de fuego y población carcelaria.

La tasa de homicidios "ha bajado a la mitad desde 1991, con una reducción del índice de crímenes violentos de 748 a 399 por cada 100.000 habitantes en este período", agrega.

"Lo que esta investigación muestra es que Estados Unidos es un sitio mucho más tranquilo y seguro que lo percibido por el ciudadano común", opinó el fundador del instituto, Steve Killelea, para quien "la gente tiene más miedo de lo necesario". Las tasas de homicidio en todo EEUU bajaron un 3,78 por ciento desde el año pasado, según Killelea.

Además, los crímenes violentos han bajado en torno al 6 por ciento y el número de personas en las prisiones ha descendido un 0,6 por ciento, agregó.

Killelea sostuvo que si todos los estados de EEUU tuviesen los índices de delincuencia que se registran en Maine, el país se ahorraría unos 270.000 millones de dólares (206.000 millones de euros) anuales en gastos de policía, enjuiciamientos y cárceles.

"La contención de la violencia" cuesta a EEUU 460.000 millones de dólares (351.000 millones de euros) anuales, o 3.217 dólares (2.455 euros) por contribuyente de impuestos, según el instituto. Killelea afirmó que "los medios tienen un papel en la creación de esta imagen de un país violento", y consideró que "la única gran noticia es la noticia mala, y la violencia vende".

En su "Índice de paz", el informe coloca como primero al estado de Maine mientras que Louisiana quedó a la cola como el estado con más violencia.

La comunidad más pacífica de EEUU resultó ser la de Cambridge-Newton-Framingham, en el estado de Massachusetts, en tanto que Detroit-Livornia-Dearborn (Michigan) aparece como la más violenta.